Primera Parte
Quién lo diría pero mis vacaciones en China fueron geniales. Shanghai creo que es mi ciudad favorita del mundo ahora mismo.
¿Sabéis lo que es tener puestecillos y tiendas ropa, complementos, cosas adorables y random, y comida por tooooooooooodas partes?
Pues yo ahora sí, y es una puta pasada. Eso sí, el metro es gigante y siempre está lleno.
Creo que uno de los pocos inconvenientes que le encuentro es el clima.
En verano al menos, hace mucho calor, lo que se dice MUCHO y la humedad... sin comentarios. Pero bueno, si estás en casa con el aire puesto no se nota.
Me encanta que ahora pueda decir al ver estas fotos "Yo he estado ahí".
Creo que siempre le he tenido un gran recelo a lo que es China, teniendo una familia china y viviendo en occidente el contraste que ves el realmente grande y no siempre gusta, pero gracias a estas vacaciones gran parte de mis prejuicios han desaparecido.
Creo que es una ciudad increíble para pasar unas vacaciones o incluso un par de años mientras estudiar, pero por mi parte no pasaría el resto de mi vida ahí, es una ciudad tan moderna y luminosa que terminas echando de menos los edificios renacentistas, las farolas negras y todo este aire europeo con jardines y fuentes.
Algo que realmente no me esperaba fue que la gente no se fija en cómo vistes, si vas arreglada o no, de este estilo o del otro.
Un día mientras estaba paseando con mi prima por las tiendas que hay por los túneles del metro, metros o debería decir kilómetros de tiendas, vimos a dos chicas que iban totalmente lolitas, con sus zapatitos de muñeca, las medias, los vestidos pomposos y hasta las sombrillas, pero nadie parecía fijarse o les daba igual.
Eso fue algo que jamás pasaría en España y a lo que no estaba acostumbrada pero me sorprendió gratamente.
En general, creo que guardo muchos recuerdos increíbles de ese verano y seguramente han marchado una pequeña parte de mi adolescencia.
